La buena intención no basta
Por Miguel
Carrillo Bascary
La taxonomía de las banderas nos aporta una especie muy variada que
son las vinculadas con la cultura o el folclore.
Ellas expresan particularismos significativos para los colectivos sociales que
las utilizan en sus actividades y son una forma de hacer presente valores y
hechos propios de la temática. En este tipo de banderas también se inscriben
las conmemorativas. Un ejemplo que tratamos en este Blog hace unos días es la
“bandera brocheriana[1]”.
Hoy me interesa rescatar de la memoria el curioso ejemplo de la “bandera de los jinetes” que si bien
nació y se usó en la provincia de Entre Ríos (Argentina) tenía potencial para
difundirse en el extenso ámbito donde se practica las jineteadas, tan cara a
las culturas ecuestres de todo el mundo. No ocurrió así, como veremos.
Con ella se intentó nuclear
a quienes practican y los que gustan de la jineteada
argentina[2],
tradicional actividad que cultiva la habilitad de aguantar sobre el lomo del
bagual (yeguarizo sin amansar) durante un breve período, la que recibe otras denominaciones
según sea el país donde se practique.
En Argentina su máxima expresión ocurre durante el
“Festival Nacional e Internacional de la Doma y Folklore de Jesús María”
(provincia de Córdoba), que se replica a lo largo y ancho del país, así como en
todo el continente, desde Chile al Canadá. En honor a la localía, destaco que
en la provincia de Entre Ríos se desarrolla el “Festival Nacional de Jineteada
y Folklore de Diamante”, entre otros numerosos encuentros similares, donde cada
fin de semana se reúnen miles de familias que gustan de esta tradición tan gaucha.
Esta
bandera fue pensada como un emblema de orgullo y reconocimiento, para que representara
a todos los jinetes del país en sus encuentros y ceremonias. Su
creador, Hugo René Cattáneo[3], la
concibió para ser izada reconociendo lógica precedencia a la Bandera Nacional y a la provincial que corresponda, lo que señala la vocación nacional del
símbolo.
El movimiento que la impulsó
nació en el departamento de San
Salvador, provincia de Entre Ríos. Inicialmente la “bandera de los jinetes”
fue declarada de “interés municipal” por el Consejo Deliberante de esa ciudad (Resolución Nº649/ 2007)
Dos años más tarde fue reconocida por ley provincial, a partir
de la iniciativa que presentó por el senador local Horacio Díaz, con el
auspicio de los municipios de San Salvador, General Ramírez, General Campos y
Federal, junto a una decena de agrupaciones tradicionalistas de esas ciudades,
de Villaguay, Cerrito y Concordia. Puede verse su texto algo más adelante.
En el 2011, los diputados
entrerrianos Atilio Benedetti y Jorge Chemesintro plantearon la iniciativa de reconocer esta bandera a nivel nacional[4] pero no
consiguió el apoyo necesario, por lo que fue archivada.
Lamentablemente no me ha sido posible verificar si el impulso inicial arraigó en los usos de la jineteada entrerriana. Ninguna de las gestiones que realicé ante distintas autoridades y entidades vinculadas con la actividad merecieron respuesta. Al parecer no habría trascendido.
Textos
normativos
1) Ley de la provincia de Entre Ríos Nº9.007[5]:
“Artículo
1º. Determínase como Bandera Provincial
de los Jinetes a la bandera rectangular diseñada por Hugo René Cattáneo,
que presenta al centro a un jinete montado en su bagual, sobre pasto verde en
la franja horizontal inferior, con horizonte celeste y dos banderas patrias
flameando en sentido contrapuesto en la franja superior, conforme al diseño y
detalles inserto en el Anexo 1 que en dos folios forman parte integral de esta
ley.
Artículo
2º. Promulgada esta ley, el Poder Ejecutivo instará al Superior Gobierno
Nacional en la adopción de igual criterio para todo el País, al tiempo de
comunicar al Ministerio de Educación de la Nación y Gobiernos Provinciales,
para insertar en la correspondiente literatura de su ámbito de competencia,
este símbolo de la entrerrianía.
Anexo 1:
1. Formato. Rectangular con varios
colores.
* El color verde corresponde al campo
de jineteada. El azul celeste de un cielo sin nubes.
* En el centro un bagual corcoveando,
con el penacho en las crines que lo identifican como tal.
* Sobre el bagual un jinete afirmado
en los estribos, con las riendas en una mano y en la otra mano el rebenque en
lo alto para castigar.
* Se puede ver la vestimenta y
elementos que generalmente se usan en las jineteadas: boina, camisa, bombacha,
cinto, botas, espuelas y el guante que protege las manos del roce con las
riendas.
* Se ve el basto con la estribera y el
estribo, la cincha con la encimera, el bocado con las riendas, el bozal que se
usa para llevarlo al palenque y sujetarlo al mismo.
* Se observa una sombra en el rostro
del jinete y, en el suelo debajo del caballo, eso nos dice que es una foto
tomada cerca del mediodía por el ángulo que presenta.
2. Simbolismo.
No pueden faltar en este trabajo los
colores de nuestra Enseña Patria, por eso en los ángulos superiores se ubican
dos Banderas Argentinas flameando en sentidos opuestos que sirven de contención
a los jinetes y los acompañan en el tiempo. Estando la Bandera desplegada,
indican que de Norte a Sur y del Este a Oeste en este País se practica este
deporte que cada vez tiene más aceptación en el público”.
Observación: la imagen de la bandera aprobada por esta ley que se reprodujo en el Diario de Sesiones pertinente, es la que abre la presente nota.
2) Proyecto de ley nacional (expediente 4222-D-2011)
“Artículo 1º.
Identifíquese como "Bandera Nacional de los Jinetes" a la Bandera
Provincial de los Jinetes promulgada por la ley 9907 de la Legislatura de Entre
Ríos.
Artículo 2º.
La Bandera Nacional de los Jinetes es la bandera rectangular diseñada por Hugo
René Cattáneo, que presenta el centro a un jinete montado en su bagual, sobre
pasto verde en la franja horizontal inferior, con horizonte celeste y dos
banderas patrias flameando en sentido contrapuesto en la franja superior.
Artículo 3º. El
Poder Ejecutivo Nacional por intermedio de los Ministerios de Educación y de
Cultura de la Nación facilitará la información pertinente y proveerá de
material literario relacionado con el tema a las distintas jurisdicciones del
país para poder ser distribuido en los establecimientos educativos”.
Evaluación vexilológica:
Cada grupo social que define identificarse con una
bandera tiene el derecho de hacerlo
en la forma que mejor resuma sus valores, realidades y expectativas, esto es
premisa básica en la Vexilología.
Sentado lo expuesto formularé algunas apreciaciones objetivas desde la técnica vexilológica,
la Vexilografía[6],
sin mengua de la consideración que merece pieza bajo análisis. Soy consciente
que mi visión no será popular entre los impulsores del emblema, pero no hay
ninguna animadversión, en todo caso estimo que puede ilustrar sobre qué cosas se desaconsejan cuando se diseña un vexilo.
El símbolo parte de una
fotografía, así se desprende del numeral “1” del Anexo a la ley, que reza: “Se observa una sombra en el
rostro del jinete y, en el suelo debajo del caballo, eso nos dice que es una foto tomada cerca del mediodía por el
ángulo que presenta”. Esto es un error de concepción que condiciona todo el
desarrollo, algo
totalmente desaconsejado en Vexilología.
El diseño consiste en la sumatoria de diversos elementos identitarios. El detalle de la
figura, tal como lo precisa el numeral 1 del Anexo legal, es tan minucioso que
escapa de todo observador que no sea experto en jineteada. La inclusión de dos banderas ondeantes implica una redundancia que debió evitarse. Considerando el simbolismo
que se le atribuye a esta duplicación hubiera sido más sencillo buscar otro elemento que
represente la extensión territorial que abarca la actividad.
Desde lo conceptual la imagen también es desacertada. En primer lugar, porque se centra y limita en el jinete y su montado, de manera que falta toda referencia al protagonismo del pueblo que también es parte del espectáculo. El trasfondo es igualmente equívoco, ya que plantea un campo abierto hasta el horizonte, nada más alejado de la realidad de la actividad que se concreta en un recinto cerrado.
Adenda: símbolos de la Municipalidad de San Salvador[7]
La ciudad se fundó el 25 de diciembre de 1889, hoy cuenta con poco más de 15.000 habitantes. Adoptó desde antiguo un escudo de armas que incluye: la cruz representa a la cultura occidental cristiana, la estrella de Belén recuerdo del día en que se creó la ciudad, la bandera del primer gobernador de Entre Ríos, Francisco Ramírez, (primera que utilizó la provincia) la que señala “el orgullo de pertenecer a la misma” y el monumento a la Batalla de “Arroyo Grande” (1842) en recuerdo de los antecedentes nacionales y federales de la región. El campo verde, por su parte, “refleja la esperanza de un futuro basado en la cultura del esfuerzo y del trabajo en la agricultura, la industria y la ganadería”.
La bandera surgió de un concurso popular y fue aprobada en el
año 2001. La web del municipio menciona que: las franjas celestes y
blancas en diagonal significan el camino del futuro patrio; el campo verde
expresa la siembra y la esperanza; el campo amarillo remite a la producción y la
riqueza. El Sol naciente del escudo dibujado al Este alumbra a San Salvador. El
engranaje alude a la tecnología, las industrias y el progreso, mientras que la
panoja de arroz a las fuentes de trabajo que genera esta producción,
tradicional en la región. La figura irregular en rojo reproduce el territorio
del departamento del que es cabecera el municipio.
[2] Una semblaza sobre ella puede verse en la fundamentación del
proyecto de ley presentado al Senado de la provincia de Entre Ríos: https://www.senadoer.gob.ar/galeria/sesion/129-5.pdf
[3] Referencias sobre Hugo René
Cattaneo, en http://mensuariosansalvador.blogspot.com/2009/02/los-nuestros-hugo-rene-cattaneo.html
[4] Expediente 4.222-D-2011. Ref. https://www.hcdn.gob.ar/proyectos/proyecto.jsp?exp=4222-D-2011
[5] Tratamiento sobre tablas en el Senado de Entre Ríos: sesión del 13 de agosto de 2008, pp. 121 a 126: https://www.senadoer.gob.ar/galeria/sesion/129-5.pdf. Tratamiento sobre tablas en la Cámara de Diputados: sesión del 18 de
mayo de 2009, p. 130: https://www.hcder.gov.ar/archivosDownload/diarios/D05-18032009o130.pdf
[6] La Vexilografía es la rama de la Vexilología que estudia el diseño y
la forma de elaborar una bandera.
No hay comentarios:
Publicar un comentario