Historia y vigencia
Por Miguel Carrillo
Bascary
El Santo Rosario es una antiquísima oración católica que expresa la
devoción por nuestra madre del Cielo, la Virgen María. Desde hace más de mil
años fue adaptándose hasta llegar a su forma actual. Al parecer se sistematizó
en el siglo IX, entre los monjes de San Benito. En sus apariciones registradas
a lo largo de los tiempos Nuestra Señora
ha pedido que se le rece de esta manera, al menos desde que en el siglo
XIII se le apareció a Santo Domingo de Guzmán, fundador de la Orden de los Predicadores,
que la extendió en todo el mundo.
Promediaba el siglo XVI
cuando la fe musulmana amenazaba extenderse por toda Europa y sofocar al cristianismo,
fue entonces que el Papa Pío V pidió a su grey que impetrará a María rezando el
Rosario. El 7 de octubre de 1571 se
libró una decisiva batalla marina en el golfo de Corinto frente a las costas de
Lepanto (hoy llamada Naupacto, Grecia). Las primeras acciones anticiparon el
predominio otomano. En Roma el Papa se encontraba en oración y en un momento
dado recibió la revelación de que el triunfo cristiano había sido alcanzado,
por lo que convocó a quienes estaban en la ciudad a dar gracias a Nuestra Señora. Dçias más tarde se confirmo la
noticia de que en ese mismo momento habían muerto el almirante turco Alí Bajá y
su segundo Mehmed Siroco, con lo que su armada
entró en confusión y se consumó su derrota. La importancia fundamental
de la batalla se expresa en la ponderación de las fuerzas enfrentadas, pese a
darse en el mar; hubo 86.000 cristianos y unos 90.000 otomanos, en casi 300
embarcaciones por bando.
Como agradecimiento Pío V
instituyó la festividad de Nuestra
Señora de las Victorias el primer domingo de octubre y le reconoció el
título de “María Auxilio de los Cristianos”, con lo que nació la advocación de “María
Auxiliadora” a quien que en Argentina se la considera patrona del agro.
El nombre de Rosario significa “corona de rosas” y se compone de “Aves Marías”, con
padrenuestros y glorias, inrtercalados, puede rezarse en voz alta o metalmente,
algunos se ayudan con un collar de cuentas que sustantiva la designacion. No
solo es una sucesin de alanbanzas a María, también a la obra de Dios que se concreta
en su rol de madre de Jesús y de la Iglesia. Los papas han recomendado insistentemente
el rezo del Santo Rosario.
En 1573, el Papa Gregorio
XIII cambió el nombre de la fiesta de
Nuestra Señora del Rosario y Clemente XI la extendió a toda la Iglesia de Occidente.
Posteriormente San Pío X la fijó cada día 7
de octubre.
La devoción por Nuestra
Señora del Rosario está difundida
extraordinariamente por toda Latinoamérica. La Historia argentina atribuye a
la intervención de María Santísima del Rosario en los triunfos contra los invasores británicos, ocurridos en 1806 y 1807, por lo
que se recreó la advocación de Ntra. Señora de la Reconquista y la Defensa, a la que Santiago de Liniers ofrendó los vexilos tomados a los invasores. Está comprobado que
el mismísimo general Manuel Belgrano
rezaba cotidianamente el Santo Rosario junto con sus tropas.
En este año 2024, víspera
del día que se le consagra, quise ilustrar esta breve referencia con una lámina providencialmente salvada de las
llamas a consecuencia del incendio sacrílego del templo de la Orden de Santo
Domingo, sito en la ciudad de Bs. Aires. Fue en el año 1955 que una turba
enardecida invadió el convento y el templo que le está dedicado y cometió todo
tipo de desmanes para finalmente convertirlo en pasto de las llamas.
En las dependencias conventuales tenía su asiento el Instituto Belgraniano. Es dactible que entre la documentación se encontrara la lámina que abre esta nota que se preservó por encontrarse comprimida junto a otros papeles por lo que el fuego carcomió su perímetro, sin llegar a consumirla. Así, quemada en sus laterales, fue rescatada en la calle por el Dr. Manuel Belgrano Ledesma [1], descendiente del prócer en cuarta generación, que la hizo enmarcar y la conservó en su casa. Hoy se exhibe en la forma que la vemos, colocada en la sede de la entidad habiendo sido donada por su hijo, el Lic. Manuel Belgrano, quien es hoy su presidente. Un silente signo de una piedad a toda prueba.
Para saber más, puede leerse en este Blog:
Banderas de la Reconquista (Bs. Aires); https://banderasargentinas.blogspot.com/2019/09/banderas-de-la-reconquista-bs-aires.html
La Virgen María y el General de la
Bandera; https://banderasargentinas.blogspot.com/2015/10/7-de-octubre-senora-del-rosario-y-el-de.html
Las imágenes de Nuestra Señora en la
Catedral de Rosario/Partes 1 y 2; https://banderasargentinas.blogspot.com/2021/10/las-cinco-imagenes-de-ntra-sra-del.html
y https://banderasargentinas.blogspot.com/2021/10/las-imagenes-de-nuestra-senora-en-la.html
200 años de un justo título. La Villa
del Rosario y su Santa Patrona; https://banderasargentinas.blogspot.com/2023/12/200-anos-de-un-justo-titulo.html
A 250 años de llegar a Rosario la
histórica imagen de su Virgen Fundadora; https://banderasargentinas.blogspot.com/2023/05/mas-de-dos-siglos-en-pocas-palabras.html
Rosario, reconocida como villa; http://banderasargentinas.blogspot.com/2023/01/1823-rosario-reconocida-como-villa.html
[1] Falleció en el año 1995, era progenitor del actual presidente del Instituto Nacional Belgraniano, Lic. Manuel Belgrano.
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