sábado, 1 de noviembre de 2025

Escudo argentino: ¿Azur o Celeste?

Cómo y porqué el escudo argentino es celeste y blanco


                              De azur                                                               En celeste

Por Miguel Carrillo Bascary

La pregunta es un clásico para quienes se interesan en la Heráldica y en la evolución histórica del Escudo nacional argentino. En esta nota aporto elementos para resolver el interrogante en forma decisiva.

Introducción al tema

Se sabe que en Heráldica el color azul se traduce en un esmalte que se denomina “azur”, mientras que el celeste no es considerado[1].

En este punto corresponde aportar alguna información para quienes no sean argentinos. El escudo de esta Nación surgió por decisión de la Asamblea General Constituyente que se reunió en Bs. Aires a comienzos del año 1813. Lamentablemente se ignora el texto que lo implementó ya que las actas de la corporación se perdieron. Lo que se conoce de su actuación es por referencias contenidas en fuentes periodísticas y documentos, esto condiciona el análisis y, entre otros temas, impide conocer de qué manera se dispuso.

Se conserva el escudo que la Asamblea lució en el frontis del edificio del Consulado de Bs. Aires, donde sesionaba, actualmente está en el Museo Histórico Nacional[2]. La pieza conserva su pintura original pero el paso del tiempo ha virado su tonalidad, de manera que no permite identificar cual fue el preciso color del cuartel superior.

Existen numerosos testimonios del sello que la Asamblea usó para legalizar sus despachos y que aplicó en la documentación emanada del cuerpo, tanto con tinta como sobre lacre y que se reprodujo en numerosas publicaciones impresas de la época. Lo propio ocurre con el Poder Ejecutivo que, por disposición de la anterior usaba el mismo sello[3]. 

Sello en lacre  y su imagen monocroma 

Analizando la estructura de estos sellos es fácil de advertir que el artífice que lo confeccionó apeló al sistema del jesuita Pietra Santa para plasmar las características del diseño. Efectivamente, en esas imágenes se observa que el cuartel superior del blasón está representado por un rayado horizontal, lo que equivale al “azur” heráldico, conforme la codificación del caso. Por su parte, el inferior es totalmente liso, lo que indica que el metal “plata” o blanco, como se lo menciona comúnmente. Los restantes elementos de no muestran indicación alguna de su naturaleza, con lo que la Heráldica señala que van “en sus colores”, es decir conforme a lo que la generalidad de las personas tiene internalizado.

Primeros tiempos

Hay otras imágenes contemporáneas que reproducen el escudo de la Asamblea. Es la pintada en la Bandera Nacional de la Libertad Civil y en el escudo de la escuela para la ciudad de San Salvador de Jujuy, que dispuso dotar el general Belgrano a mediados del año 1813. Ambos se conservan en la “Casa de Gobierno” de la provincia jujeña. Cabe suponer que el prócer ordenó la reproducción teniendo como modelo los despachos oficiales sellados por la Asamblea y el Directorio[4], por lo que mandó pintar en azur y plata (azul y blanco)[5].

                             La bandera y el escudo de la Escuela de la Patria    

A partir de las investigaciones de Julio Luqui Lagleize María Cristina D’Andrea[6] se puso en valor la bandera del Regimiento 7 que compabtió en el Alto Perú y que también inegró las fuerzas que comandó San Martín. Sus características permiten datarla ca. 1813. Actualmente está en el Museo Histórico de Montevideo. Como se obseerva el escudo que carga en su centro es celeste y blanco.

 

La Vexilología aporta otro testimonio bajo la forma del escudo contenido en la bandera del Ejercito de los Andes que el general San Martín hizo preparar en vísperas de su partida para libertar a Chile (enero de 1817). El lábaro se conserva en el memorial que le está dedicado, en la ciudad de Mendoza. En este caso se empleó el celeste.

Anarquía iconográfica

Perdida la documentación original, como se dijo, cada artífice que procuró reproducir el Escudo se consideró en libertad para disponer según su criterio. Son numerosísimas las imágenes concebidas muchos años después que todavía se conservan, La iconografía aporta algunas en monocromo y otras en color. En promedio se advierte un decidido predominio del celeste, lo que desde ya constituye una anomalía para la heráldica. La pluralidad de diseños del Escudo Nacional es inconmensurable, varía en cada uno de sus detalles. Esta diversidad que no pudo ser contenida ni cuando el Gobierno nacional intentó establecer un único modelo.

Interesa señalar que el 5 de marzo de 1885 el Ministerio de Relaciones Exteriores[7] emitió una circular destinada a los cónsules del país en el exterior. Esta directiva no resulta de aplicación general, sino que se limita a los destinatarios de la comunicación. En ella se expresaba:

El escudo será pintado con los colores y atributos que dispuso la Soberana Asamblea de 1813. Es de forma oval, azul en sus dos cuarteles superiores y blanco en los dos inferiores”.

La referencia a dos cuarteles parece derivar que la pica y el gorro se extendían en todo el largo del eje de la figura. Más allá de esta curiosidad, se anota la preferencia por el azul sobre el celeste.

Una norma fundamental

Fue el Decreto emitido el 24 de mayo de 1907, por el presidente José Figueroa Alcorta la norma que decidió la cuestión sobre si en el blasón nacional debía figurar el azur o el celeste[8]. Este es su tenor:

La sola lectura de la norma permite dilucidar que consagra oficialmente el celeste para el Escudo nacional argentino. 

Ese decreto se elaboró sobre la base de los estudios del Dr. Estanislao Zeballos, erudito jurisconsulto, que fuera ministro de Relaciones Exteriores de Figueroa Alcorta entre noviembre de 1906 y junio de 1908, quien además ocupó otros numerosos cargos públicos. Esta condición explica suficientemente la emisión del Decreto en comentario. Su investigación  fue publicada en el año 1900 bajo el título: “La Bandera y el Escudo Nacional[9]”, en su obra Zeballos intenta compatibilizar la clásica definición del azur que define la Heráldica y la inexistencia de una denominación para el celeste, a este fin lo denomina como “azur ligero”. La publicación tuvo carácter oficial.

Estos antecedentes permiten afirmar que la decisión oficial fue, de carácter político, aunque sin ninguna connotación ideológica, simplemente fue coherente con su sólido fundamento histórico, avalado por una tradición que por entonces era casi centenaria.  

Ratificación

Con este antecedente y considerando otras referencias válidas para conformar la imagen del símbolo fue que el Decreto Nº10.302/ 1944 definió la representación oficial del símbolo. Pese a todo hasta el momento persiste lo aleatorio de su composición[10].

De esta manera, se convalidó el celeste para el campo superior del blasón, pero como la norma no contiene una descripción técnicamente precisa subsiste la aleatoriedad respecto de su tono exacto. El diseño que se tuvo a la vista cuando se emitió el decreto se perdió en los meandros administrativos, por lo que solo se disponen de algunas imágenes contemporáneas a la época. La que se adjunta evidencia el paso del tiempo, intentando rescatar su aspecto original se la presenta remasterizada, por caracterizarla de alguna manera.

  
Imagen elaborada por      
Francisco Gregoric      

Por su parte, el diseño de la Bandera Nacional tampoco contaba con un modelo patrón confore a la técnica moderna. Al aproximarse el bicentenario de la Revolución de Mayo se constituyó una comisión multidisciplinaria que trabajó por más de diez años para arribar a un consenso. La seriedad de la tarea lo demandaba, de sus conclusiones emergió el Decreto Nº1.650/ 2010 que bajo la norma técnica IRAM-DEF D 7677, especificó que el celeste debía corresponderse con lo previsto en su artículo 3.4.1 y el Anexo B según el catalogo Pantone. De esta manera siguiendo lo dispuesto por el Decreto de 1904, que mantiene toda su vigencia, el celeste con que debe representarse el campo superior del Escudo nacional es el que corresponde a la Bandera Oficial de la Nación en la forma en que lo definió el Decreto Nº1.650/ 2010.

Conclusión

- De esta manera, queda respondido el interrogante que titula esta nota.

- El Escudo Nacional argentino debe representarse siempre en celeste y blanco, lo que es coherente con los usos y costumbres más extendidos en cuanto a la forma en que se lo ha representado en la Historia.


Notas y referencias:

[1] Se anota que, a pesar del dogma enunciado la Heráldica aporta numerosas excepciones fácticas, lo que se deja señalado.

[2] En algún momento se dudó de su autenticidad interpretando que pudo pertenecer al Correo, hoy la crítica histórica la acepta en forma mayoritaria.

[3] Decreto del 13 de marzo de 1812. Registro Oficial, Tomo I, p. 205

[4] El sello no se conserva, pero según toda evidencia fue confeccionado en madera por el grabador Juan de Dios Rivera Túpac Amaru (Cuzco, 1760-Bs. Aires 1843), siguiendo las instrucciones que recibió de la Asamblea.

[5] Un tratamiento exhaustivo en Carrillo Bascary, Miguel “El Azul crepúsculo en la Bandera de la Libertad Civil. Manifestación de la Heráldica en la visión de Belgrano” (https://banderasargentinas.blogspot.com/2018/09/el-azul-crepusculo-en-la-bandera-de-la.html)

[6] https://fiav.org/wp-content/uploads/2021/06/ICV21_17-Luqui.pdf

[7] La circular no figura en el Registro Nacional, fue publicada en el Tomo II, p. 106 del “Diccionario Legislativo” de Augusto Carette y Carlos Attwell. Bs. As. 1913.

[8] La norma puede consultarse en el Registro Nacional del año 1907, tomo II - p. 11, o en el Boletín Oficial de la República Argentina: https://www.boletinoficial.gob.ar/detalleAviso/primera/11419325/19070529?busqueda=1

[9] Noticia sobre el mismo en Carrillo Bascary, Miguel. “El Escudo y los Colores Nacionales” (argentinos) https://banderasargentinas.blogspot.com/2016/05/el-escudo-ylos-colores-nacionales.html.  Puede accederse a la obra de Zeballos desde: https://es.wikisource.org/wiki/El_escudo_y_los_colores_nacionales#1

[10] Al respecto puede verse: Miguel Carrillo Bascary, “Cuando la incoherencia oficial asombra e induce al error (https://banderasargentinas.blogspot.com/2022/06/cuestion-que-se-las-trae-los-simbolos.html). También, de Francisco Gregoric:  “Modelo incorrectos del Escudo Argentino” (http://banderasargentinas.blogspot.com/2017/02/uso-de-modelos-incorrectos-del-escudo.html

domingo, 26 de octubre de 2025

Vexilología Arqueológica

Desarrollo de la terminología

Vexilo romano, siglo III, encontrado en Egipto,
hoy en el Museo Nacional Pushkin, Moscú (mide 47 x 50 cm)

Por Miguel Carrillo Bascary

En enero del año 2024 di a conocer “Subdivisiones de la Vexilología. La riqueza de la diversidad[1]”, donde ensayo una taxonomía de la disciplina. En particular caractericé a la Vexilología Arqueológica como aquella “rama que trata de los vexilos preservados en yacimientos y objetos de culturas desaparecidas”. Hoy considero que esa visión debe ampliarse en los términos que acá concreto.

Para esto partiré de la forma con que el Real Diccionario de la Lengua Española ilustra sobre el término “arqueología”, diciendo que es "la ciencia que estudia lo que se refiere a las artes, a los monumentos y a los objetos de la antigüedad, especialmente a través de sus restos[2]”.

Aplicando ese concepto, la Vexilología Arqueológica tendría como objeto de conocimiento:

“…los vexilos producidos por las sociedades del pasado y sus culturas, a través del análisis de sus vestigios, obtenidos a todas las fuentes posibles, particularmente las que constan en textos e imágenes y de las piezas materiales que subsisten”.

Su método consistiría en la reflexión a través de la inducción y la deducción de sus caracteres culturales, materiales y funcionales.

En este punto hay consenso en la comunidad erudita de la especialidad enque el hito inicial de la Vexilología fue el 1º de octubre de 1961[3] cuando se publicó el primer número del “Flag Bulletin” concebido por Whitney Smith en colaboración con Gerhard Grahl. Tal como lo definió la “Federation of Vexillological Associations” (FIAV)

Sin soslayar la subjetividad de tal fecha, la trayectoria seguida por el estudio de los vexilos admitirá que hay un antes y después de la sistematización inspirada por Smith, que dio origen a la disciplina, tal como hoy se la conoce y que tomó como origen del nominativo a los vexillum de la Antigua Roma.

 

Fresco en una tumba de Paestrum, Italia (ca. 408 a.C.)

Por esta causa, entiendo que desde entonces (1961) comenzó el período histórico de la disciplina, mientras que el anterior bien puede calificarse como su etapa pre-histórica, que abarcará los vexilos sin mayor conexión con aquellos que trascendieron de la fecha bisagra. Para intentar ser más claro presentaré algunos ejemplos característicos.

En consecuencia, será materia de la Vexilología histórica el estudio de las banderas que, de una u otra manera, mantienen una presencia real desde 1961 hasta el presente, lo que incluye a sus precedentes, la normativa, las imágenes y las costumbres vinculadas. Los ejemplos típicos son las enseñas de los estados que componen la comunidad internacional.

Se encuadrarían en la Vexilología Arqueológica el análisis de los vexilos emanados de las manifestaciones culturales previas a 1961, es decir los que no guardan relación con el presente, ni con el pasado cercano, y que, por lo tanto, sus fuentes son imperfectas, su trayectoria no es clara o presenten imágenes disociadas, descripciones parciales, trazos o colores dudosos, y otras características similares. Como ejemplos: los que pertenecieron a las hordas tártaras, los sasánidas, la bandera de las hadas del clan McLeod[4], o las de los reinos africanos extintos antes de la fecha de quiebre.

Braolauch shi, bandera del hada Titania (Escosia)

Reconstrucción hipotética, según RootOfallLight

Los períodos revolucionarios aportan muchos casos de este tipo ya que las descripciones son imperfectas y es usual que no existan imágenes, como ocurre con algunos de las banderas de provincias argentinas.

Bandera a la que se atribuye ser de La Rioja (Argentina) durante el gobierno del caudillo Facundo Quiroga, ca. 1823
(Imagen elaborada por Francisco Gregoric)

Empero, más allá de la disquisición planteada la distinción nunca puede dogmática, habrá cantidad de oportunidades donde un vexilo podrá caracterizarse como un “vexilo-arqueológico” cuando se lo haya olvidado o sobre cuyo conocimiento solo hay mínimas referencias. Para un ejemplo puede verse: “Antigua bandera corporativa de la IAME. Un vexilo que no fue[5].

Como toda disciplina que se nutre del pasado las conclusiones que aporte la Vexilología Arqueológica serán netamente inestables, ya que cualquier hallazgo tendrá el potencial de cambiarlas. Además, la perspectiva de estudio se verá influida por la cultura del intérprete, con sus múltiples implicancias y estos factores lo acercarán a las realidades, materiales y conceptuales, del vexilo cuyos restos o rastros sea objeto de análisis.

Estimo que los párrafos reseñados bastan para introducir la temática en el amplio mundo de las visiones que nos ofrece esta particular rama de la Vexilología. Queda propuesto y esbozado el concepto, al par que invito a los colegas vexilólogos a considerarla como una herramienta del saber propio de la temática.

sábado, 25 de octubre de 2025

Bandera invertida, momento difícil

Desisdia y responsabilidad

Por Miguel Carrillo Bascary

El motivo de esta nota: destacar un gravísimo error cometido, señalar responsabilidades y vivenciar en qué poca consideración se tiene a los símbolos oficiales.

Lo concreto: la colocación en forma invertida de la bandera provincial de Santa Fe (Argentina)

Bandera de la provincia de Santa Fe en su correcta posición

La sensación: una profunda pena.

Los afectados: el pueblo de la provincia de Santa Fe (Argentina) y su gobierno, representados en esa bandera.

El lugar: un jerarquizado ámbito público de una importante ciudad de la provincia.

El momento: un significativo acto cívico, con presencia de autoridades, fuerzas vivas y vecinos.

Lo cierto: pese a la gravedad del hecho, desde mi humilde parecer y sin perjuicio del criterio judicial eventualmente llamado a intervenir, no se trató de un “ultraje" que podría haber dado lugar a una acción pública, ya que el Artículo 222 del Código Penal de Argentina que tipifica el delito, demanda que haya un dolo evidente, una intención clara de mancillar el símbolo. Considero que en el caso hubo una falta objetiva de la responsabilidad inherente a los involucrados.

Los responsables objetivos:

a) el/la docente que estuvo a cargo de la delegación que representó a la comunidad educativa del establecimiento; él o ella es a quien mayor responsabilidad tiene.

b) quienes armaron la bandera en la oportunidad.

c) la abanderada, que debió advertir el error. Téngase en cuenta que la niña se encuentra cursando el último año del nivel secundario y, que si consideramos la fecha del acto, ya debía haber participado de las ceremonias con que en Argentina se celebran las principales fechas patrias, de tal forma que contaba con experiencia en la función.

d) el/ la directora/a del establecimiento, quién en tal carácter debió preparar adecuadamente a su cuerpo docente y a la abanderada de la institución para que desempeñaran adecuadamente sus funciones.

e) los organizadores del acto que, siendo tan evidente la falta cometida, quienes debieron intervenir para que la abanderada no subiera al estrado en estas condiciones o, consumada su presencia, debeieron acercársele y darle la orden de que se retirara transitoriamente para colocar correctamente la bandera en el asta, para más tarde reintegrarse a la posición inicial.

El responsable mediato: el Ministerio de Educación de la provincia de Santa Fe, que desde hace años omite incluir el ceremonial de los símbolos patrios en la currícula de la carrera docente y que tampoco aporta instancias de actualización y perfeccionamiento en la materia.

La impotencia: la de quien firma esta nota ya que, de haber obedecido a un primer impulso, tendría que haberme destacado de entre el público, atravesar el espacio central de la ceremonia y encarar a la abanderada para pedirle que rectificara la posición del paño, lo que por, sobre todo, habría causado un importante trauma a la joven, además de generar un verdadero escándalo dado el marco en que se desarrollaba el acto.

La enseñanza: se hace evidente que quienes se desempeñan en funciones de responsabilidad deben contar con la capacitación suficiente para hacerlo; no fue el caso de los involucrados en el bochorno. Cuantos más conocimientos debe tener el funcionario, mayor debe ser su atención para que no se “deslicen” este tipo de cosas. De existir, se podría haber intervenido antes de que la escuadra que portaba la bandera invertida accediera al estrado en que se posicionó frente al público y a las autoridades.

Medidas de prudencia, con humildad y sincero deseo de que no se malinterpreten mis palabras, me permito aconsejar que, así como se asignan diversas responsabilidades a los miembros del equipo que representa a una institución o del que organiza la actividad, es adecuado confiar en un colaborador específico que controle la forma de presentación de los abanderados y escoltas, ANTES de que se hagan presentes en el escenario y que, además, cumplan un protocolo de intervención para el caso que ocurra una irregularidad tan evidente como la expuesta. También: que en los guiones de la ceremonia se incluyan las ordenes necesarias para que las escuadras se desplacen en tiempo y forma, las que incluirán las moniciones adecuadas para que posicionen correctamente la bandera que portan. Obsérvese que en la fotografía se advierte que la escuadra escolar antecede a las banderas de unidades pertenecientes a las fuerzas de seguridad presentes, lo que infringe la precedencia protocolar.

Mi respeto: para los colegas implicados en el hecho, razón que me lleva a no identificar las circunstancias del caso y; agrego: destacar que considero a estas puntualizaciones como una corrección fraterna, al igual que aquellas que oportunamente recibí yo de otros colegas de mayor experiencia.

La esperanza: que este tipo de errores no se repitan.

miércoles, 22 de octubre de 2025

Bandera de la ciudad de Santa Fe, la definitiva

Apuntes sobre su proceso

Bandera de la ciudad de Santa Fe de la Vera Cruz

Por Miguel Carrillo Bascary

Hace algo menos de un año la Municipalidad de la ciudad de Santa Fe (Argentina) me invitó a sumarme al jurado que debía dictaminar sobre las propuestas que se presentaron al concurso convocado para definir el vexilo que identificaría a la “ciudad de las constituciones”. En otras notas que publiqué en este Blog referencié la experiencia y la historia implicada en el proceso y los principales diseños (ver Anexo 1). Finalmente fue seleccionada la propuesta de Jeremías Martínez De Mattia. Si bien se presentó al público como “la nueva bandera de la ciudad”, en realidad se trató de un anteproyecto, ya que en las condiciones de la convocatoria se había especificado que:

“… el Departamento de Diseño e Imagen dependiente de la Dirección de Comunicación Pública y Relaciones Institucionales de la Municipalidad de Santa Fe podrá disponer la realización de todas aquellas adecuaciones que garanticen la adecuada reproducción técnica, (...), siempre respetando las características del diseño y originalidad de la propuesta ganadora»

Se abrió entonces la siguiente etapa, que habilitó la intervención del Municipio con vistas a definir la bandera que sería oficializada. A esto se avocó el equipo referenciado. Según me los hizo saber la Lic. Alina Hill, integrante del área, también participaron, la Directora Ejecutiva de Comunicación Pública y Relaciones Institucionales, Lic. Soledad Mizerniuk; la Lic. Delfina Baumann, coordinadora de Comunicación; la Lic. Mariana Perticará y Lic. Clara Franco, además de los diseñadores que constan seguidamente.

è        Documento de trabajo 1

A mediados de año recibí en consulta un dossier que evidenciaba el proceso al que se había sometido el diseño de Martínez De Mattia. El material se denominó: “Ajustes morfológicos, sintácticos, semánticos y cromáticos de la propuesta ganadora de la Bandera de la ciudad -Etapas de trabajo, Julio 2025”. El mismo se resolvió en dos momentos:

˜        Etapa 1 “Readecuación de elementos que conforman la carga”, fue desarrollada por la Lic. María Laura Olcina. En ella se plantean varios conceptos que implican una evolución tentativa:

            Instancia A:

        Instancia B:
        Instancia C:
        Instancia D:

 ˜       Etapa 2 “Configuración final de la estructura de la carga y la sintaxis del paño”, estuvo a cargo del Prof. Matías Bonfiglio. El esquema estructura el formato sobre tres módulos verticales de idéntico desarrollo, ubicando la carga en el centro del eventual paño.

La composición de los elementos se basó en una perspectiva central cónica, sumando claroscuros para darle “volumen y realismo”. Luego se realizaron pruebas de color

De esta manera se avanzó con el proceso de síntesis que compuso la imagen que expongo:

En resumen, el primer documento de trabajo expuso la evolución con la siguiente imagen

Diseños de: Martínez De Mattia, Olcina y Bonfiglio, respectivamente.

A solicitud de la Dirección de Comunicación del municipio les hice llegar mis comentarios y sugerencias, que se reflejaron en gran medida en el rediseño, los que prefiero omitir por tratarse de aportes no vinculantes.

è      Documento de trabajo 2

Se denominó “Una bandera para la ciudad. Readecuación gráfica”. Atiende detalles de terminación del diseño, además permitió precisar que: la gama cromática que “corresponde a la sintaxis de la Bandera Nacional y de la tradición belgraniana” que aquilata la ciudad de Santa Fe. Se atribuye al blanco la representación de la paz, la pureza y la integración; mientras que el celeste remite a los ríos Paraná y Salado, junto a la laguna Setúbal, lo que en conjunto expresan la “geografía característica de la zona”. Por su parte, el Puente Colgante[1], «Ing. Marcial Candioti», queda enmarcado por laureles, vínculos de unión e integración. Por su parte, el Libro, señala a la ciudad como “Cuna de la Constitución Nacional” y “sede de las Convenciones Constituyentes”, ya que en la misma se concretaron numerosos de estos foros.

La estructura de la partición y de las cargas, se resolvieron –reitera el documento – acorde a la “ley de los tercios”, expresando una perspectiva cónica central, en simetría especular, con equivalencia de masas y densidades, integrando a los elementos con similitud de espesores. Las imágenes acompañadas parten de una perspectiva fotográfica conformada por el cauce fluvial, el perfil urbano sobre el horizonte y el puente.


Boceto del conjunto cargado
(sus elementos fueron objeto de una resolución evolutiva)

 Diseño en monocromo

Diseño oficial en monocromo

Planteo con color aplicado

Diseño a todo color

Diseño oficial a color

Referenciando la relación cromática en sintonía con la que corresponde a la Bandera nacional y a la provincial.

Nación – Provincia - Ciudad

Respecto a la bandera de ceremonia:

Oportunamente me permití señalar la necesidad de que se definiera su corbata y tahalí, como una forma de robustecer la identidad de la ciudad y de obtener un producto más acabado. Este es un aspecto descuidado en la mayoría de los concursos. Así lo recogió el equipo de trabajo y lo expresó de la manera que se plasma. Dejo constancia que la cifra “1573 corresponde a la fecha de fundación de la ciudad de Santa Fe, una lógica correspondencia, y que la de “1853 es el año en que en la misma se aprobó la Constitución Nacional que organizó el país, fecha fundamental de nuestra nacionalidad.

Bandera de ceremonia de la ciudad de Santa Fe
- Medidas: 190 x 140 cm (largo por ancho). - Tela: gross
- Colores: blanco puro; cerúleo 16-4132TC; castaño 18-1441TC;
laurel: verde neutro - Bordado solo al frente


Corbata y moño
- Colores: iguales a la bandera
- Medidas moño: 107 x 10 cm aprox. (largo x ancho)
- Medidas corbata: 50 x 10 cm (largo x ancho)
- Ornato: flecos de gusanillo de 7 cm de ancho de hilo metálico
con baño dorado y los años "1573" y "1853" bordados en oro,
de 6 cm de altura (un año a cada lado)

Tahalí
- Medidas: 10 cm de ancho, terminando en una cuja forrada
- Tela: cuero forrado en terciopelo o seda
- Colores: iguales a la bandera

De esta manera los complementos del vexilo siguen las pautas universales, representando la participación del paño. Me permito una observación: cuando se indica que los años deberán bordarse "en oro", entiendo que se debió consignar "bordados símil oro", a fin de no encarecer el producto.

Respecto a la bandera de izar:

El equipo actuante planteó una visión contrastando el vexilo con el firmamento, de la que resulta la imagen que abre esta nota.

Oficialización de la Bandera

El proceso aquí referenciado culminó permitió aprobarla bandera municipal (oficial) de la ciudad de Santa Fe de la Vera Cruz, mediante el Decreto Nº94/ 2025, que se transcribe:

“Santa Fe de la Vera Cruz, 24 de octubre de 2025

Visto: La Ordenanza Nº11.046; y

Considerando:

Que mediante la Ordenanza Nº11.046, el Honorable Concejo Municipal dispuso la creación de la Bandera Municipal encomendando al Departamento Ejecutivo la convocatoria de un concurso público para determinar su diseño y características.

Que en cumplimiento de dicha ordenanza se convocó al Concurso “Una Bandera para la Ciudad” (Decretos Nº00071/ 24 y 0089/ 24, en el cual participaron 60 propuestas, habiéndose seleccionado como ganadora la presentada bajo el seudónimo “Guardián del colgante” de autoría de Jeremías Martínez de Mattia, conforme a lo establecido por el jurado interviniente y el procedimiento de participación ciudadana implementado.

Que el dictamen del jurado destacó que la propuesta ganadora “se articula a partir de una sintaxis clara y contundente, con una gama cromática que se asocia a la Bandera Nacional en su diseño original, rememorando la tradición belgraniana de la ciudad; que su franja celeste repente los ríos Paraná y Salado, así como la Laguna Setúbal; mientras que el blanco expresa paz, pureza e integración; que el emblema central enmarcado por laureles, reproduce el Puente Colgante “Ing. Marcial Candioti”, símbolo de unión e integración; y que en la base de los gajos se representa el libro de la Constitución Nacional, reafirmando la condición de Santa Fe como “Cuna de la Constitución Nacional”.

Que la Dirección de Comunicación Pública y Relaciones Institucionales ha llevado maleante un proceso de revisión y adecuaciones técnicas de la propuesta ganadora, afín de garantizar la reproducción técnica y la adaptabilidad del diseño a los diferentes tamaños, materiales y medios de reproducción –bandera estampada (mástil) y/o bandera de ceremonias, corbata y tahalí (bordados).

Que en virtud de lo expuesto corresponde aprobar el diseño de la Bandera de la Ciudad de Santa Fe de la Vera Cruz y de su versión de Ceremonia.

Que por la naturaleza de la medida resulta procedente dictar el presente acto administrativo ad referéndum del Honorable Concejo Municipal.

Por ello, EL INTENDENTE DE LA MUNICIPALIDAD DE SANTA FE DE LA VERA CRUZ, DECRETA:

Art. 1º.- Apruebas el diseño de la Ciudad de Santa Fe de la Vera Cruz, conforma a las especificaciones técnicas que como Anexo I forman parte integrante del presente.

Art. 2º.- Establécese que la Bandera de Ceremonia de la Ciudad de Santa Fe de la Vera Cruz se confeccionará conforme al diseño aprobado en el artículo precedente, respetando las proporciones y materiales protocolarmente establecidos.

Art. 3º.- Instruyese a la Dirección General de Comunicación Pública y Relaciones Institucionales, a realizar la difusión institucional, confección y resguardo del paño oficial de la Bandera Municipal.

Art. 4º.- El presente Decreto se dicta ad referéndum del Honorable Concejo Municipal.

Art. 5º.- (De forma)

Firma: Dr. Juan Pablo Poletti (Intendente). Refrenda: Dr. Sebastián Matropaolo (Secretario de Gobierno)

Nota: el Anexo técnico consigna imágenes que constan en esta publicación. Lamentablemente la base de datos del Municipio no estaba disponible al momento de elaborarse esta.

Ratificando lo actuado, en su sesión del 16 de octubre, el Concejo Municipal de santa fe aprobó la versión final del emblema mediante su Resolución Nº25.535. de esta forma, el proceso normativo quedó perfeccionado. Solo resta concretar la ceremonia del primer izamiento oficial del vexilo lo que se concretará cuando el 15 de noviembre próximo, el pueblo de la ciudad de Santa Fe celebra los 450 años de su fundación. La confección del paño se confiará a talleres locales, es justo.

La Dirección de Comunicación del municipio ha preparado un dossier final, cuyo tenor omito transcribir ya que, entiendo, corresponde que la misma lo difunda a la opinión pública. Una vez que se concrete, aquí se integrará un link que vinculará esta nota con el documento. Se titula “Una bandera para la ciudad”, allí se detalla profusamente la evolución registrada y finaliza con un párrafo muy significativo:

“Santa Fe tiene bandera. Y con ella, una historia vuelve a izarse. Somos la Cuna de la Constitución, somos la tierra del Brigadier. Santa Fe tiene bandera y en su centro se alza el Puente Colgante; un símbolo de encuentro, de hermandad; glorioso entre los laureles. Es la bandera de una ciudad que aprendió a convivir con el agua. A resistir. A renacer. A ponerse de pie, siempre. Es más que un símbolo. Es identidad. Es presente. Es futuro. Santa Fe ya tiene bandera”.

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Anexo 1 - Otras notas sobre la temática publicadas en este Blog:

- Un mensaje de historia e identidad (Parte 1); https://banderasargentinas.blogspot.com/2025/01/escudo-y-bandera-de-la-ciudad-de-santa.html y (Parte 2); https://banderasargentinas.blogspot.com/2025/01/escudo-y-bandera-de-la-ciudad-de-santa_7.html

- Ciudad de Santa Fe, banderas y propuestas; https://banderasargentinas.blogspot.com/2024/11/ciudad-de-stana-fe-banderas-propuestas.html

- Bandera para la ciudad de Santa Fe. Una búsqueda de 450 años; https://banderasargentinas.blogspot.com/2024/09/bandera-para-la-ciudad-de-santa-fe.html



[1] Es un viaducto construido en vigas de acero. Se inauguró en 1928, fue desafectado en 1983, pero se lo rehabilitó en el 2003. Con los años se transformó en un elemento patrimonial que expresa la idiosincrasia de los santafesinos y que goza de amplia consideración en las vivencias populares.