jueves, 26 de enero de 2017

Terminales de astas

El arte en función de las banderas: complejos  terminales


Por Miguel Carrillo Bascary

Como insignias de combate primitivamente las banderas se colocaron en una lanza; moharra u otro tipo de arma blanca fijada sobre un asta. Con el correr de los tiempos el ceremonial impuso que la punta metálica aguzada fuera reemplazada por elaborados terminales que jerarquizaban la presentación de este tipo de banderas. Se procuraba embellecerlas y evidenciar el poderío económico o político de la entidad a la que correspondía la bandera.

Desde mediados del siglo XVIII y hasta comienzos del XX estos terminales alcanzaron un alto grado de desarrollo y riqueza pues se confeccionaron en metales preciosos; incluyendo pedrería; esmaltes y otros materiales nobles.

Como ejemplo de esa realidad pretérita presentamos una colección de terminales diseñados por el renombrado artista alemán Anton Johann Nepomuk Seder (11 de enero de 1850, Munich / 1º diciembre de 1916, Estrasburgo) fue un profesor y director de la Escuela de Artes Aplicadas de esta ciudad. Su talento destacó prontamente y se constituyó en uno de los principales referentes del art nuveau. Sus méritos son francamente superlativos; una aproximación a su trayectoria puede verse desde: https://de.wikipedia.org/wiki/Anton_Seder

Con referencia a la temática de este Blog nos interesa destacar la maravillosa lámina-catálogo de Seder, que data en 1904. Allí que reúne una decena de terminales de asta-banderas identificados con diferentes estados de aquél entonces. El conjunto expone una amplia variedad de técnicas y concepciones; para todos los gustos. 

Cada uno de estos terminales contiene elementos relacionados con los escudos nacionales de los estados involucrados.

En el primero hay un sombrero cónico esmaltado en forma similiar al blasón del ducado de Sajonia-Coburgo-Ghota

En el segundo destaca el águila del Sacro Imperio Romano Alemán.

En el tercero se suma al águila un cuartelado en sable y plata (negro y blanco) colores de Prusia, estado preponderante en la Confederación Germana.

En el cuarto, aparece el león rampante de doble cola correspondiente al reino de Bohemia.

En el quinto, vemos la infelkrone (corona episcopal), alusiva al Sacro Imperio Romano Austríaco:

En el sexto, destaca la corona mural, símbolo de las ciudades libres agrupadas en la “Liga Hanseática”, que suma un navío, indicando el comercio marítimo que caracterizaba a esa entidad:

El séptimo representa al Imperio Británico, fácilmente identificable por el uso de un león rampante y la corona imperial (vale redundar):

El siguiente corresponde al reino de Sajonia y reproduce su blasón en metal dorado:

Posteriormente vemos otro, con el monograma “RF” indicativo de la República Francesa.

Y finalmente hallamos el clásico escudete gules (rojo) con la cruz plata (blanca) de la Confederación Helvética.

Como rasgo común de la mayoría de los diseños vemos gajos y coronas de olivo y laurel; otro elemento que se repite son las coronas, símbolos de soberanía. En los dos primeros y en el último destaca el uso de pequeños cascabeles. Posiblemente el más extraño a nuestros ojos sea el primero, correspondiente al ducado de Sajonia-Coburgo-Ghota que incorpora un manojo de plumas de pavo real. 

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