jueves, 26 de agosto de 2021

¿Cómo cuidar las corbatas de una bandera?

Pequeños secretos que aporta la práctica 

Por Miguel Carrillo Bascary


Hace unas semanas una lectora de este Blog me consultó sobre la mejor forma de plegar la corbata de una bandera y otras cuestiones conexas, hoy cumplo en responderle, no sin agradecer la oportunidad de abordar un tema muy poco tratado cuyo análisis puede ser de interés general. 

Consideraciones previas 

Las corbatas que ornamentan las banderas de muchas naciones son elementos complementarios que por su propia naturaleza integran el conjunto que habitualmente se conoce como “bandera de ceremonia”, las que también se utilizan como “banderas de sitio o posición”. 

Estas funciones demandan que se presenten en forma impecable, por lo que la inquietud planteada por nuestra lectora cobra relevancia. Observar una bandera de ceremonia con su corbata sucia, arrugada o caída causa muy mala impresión y desmerece la imagen institucional de la entidad a la que pertenece.

Partes

Las corbatas constan de un moño (que algunos llaman “pajarita”) con dos cintas o brazos simétricos terminados en flecos dorados, un tipo de pasamanería que puede adoptar diversas formas y largos, que se cosen al extremo de cada brazo. En ocasiones incorporan leyendas bordadas en hilos metálicos que referencian a la institución a la que pertenecen.

Las corbatas tienen una composición recia ya que el textil es doble, sus costuras les otorgan una particular rigidez. Por esto cuando se doblan sin el debido cuidado se marcan y solo vuelven a su aspecto original con la ayuda de un planchado. 

Las características regladas para la corbata correspondiente a la Bandera Oficial de la Nación  y de la Bandera Nacional de la Libertad Civil están definidas en la norma IRAM-DEF D  7675, aprobada por Decreto Nº1.650/ 2010. 

El punto débil que siempre se debe vigilar cuando se arma un conjunto de asta/bandera son las cintillas con que se fija la corbata a la moharra, suele ser común que cuando se las ata se desprendan del textil o directamente se corten, lo que impide colocar la corbata. En no pocas veces puede estas cintillas deben ser cambiadas. 

Corbata en toda su extensión
Observar que el "nudo" en realidad es un anillo por el que pasa la cinta

Otro punto crítico son los flecos y el bordado de las letras que carguen ya que su textura metálica suscita enganches, de verificarse esto cabrá recortar los hilillos que sobresalgan, empleando una pequeña tijera con punta aguzada, todo con la máxima prudencia. 

Higiene 

Las corbatas deben ser periódicamente atendidas, particularmente cuando se exhiben sin alguna vitrina que las preserve del polvo, ya que el mismo se depositará insensiblemente y resultará muy evidente. Usualmente podrá higienizarse empleando con una aspiradora manual dotada de boquilla fina, evitando apoyar la misma sobre el textil. 

Adviértase la mancha en el brazo derecho
y los depósitos de polvo en toda la superficie
Observar también que esta pieza tiene un doble moño, 
lo que se contrapone a lo definido por el Decreto Nº1.650/ 2010

Otra toma, con mayor cercanía

Cuando la falta de higiene esté generalizada lo recomendable será someter la pieza a una limpieza en seco. El servicio profesional de una buena tintorería es el consejo elemental ante toda situación. 

Si se verifica que hay alguna mancha puntual habrá que intentar erradicarla. Para esto se empleará un textil que no deje residuo embebido con jabón de lavar, se hisopará el punto crítico, se dejará descansar unos minutos y luego se friccionará suavemente, hasta que la mancha desaparezca, en lo posible. Obvio que la operación debe hacerse con todo cuidado. Si quedara aureola habrá que repetir el procedimiento. 

Transporte 

Para llevar la corbata de un lado a otro se preferirá hacerlo en una bolsa sin doblar los brazos sobre sí, para que no se marquen pliegues y que se preserven en mayor medida los bordados.

Si la corbata carece leyendas es factible plegarla en la forma que expresa la foto que abre esta entrada.

Cuando se utilicen fundas para el transporte lo mejor es quitar la corbata que se acondicionará en un sobre especialmente adaptado para contenerla. Esto es particularmente necesario tratándose de banderas de guerra, ya que muchas de ellas llevan condecoraciones adosadas.

La bandera de guerra del Regimiento de Granaderos a Caballo
la unidad más condecorada del Ejercito Argentino,
constituye un caso extremo por la gran cantidad de 
condecoraciones adheridas a su corbata 

Desde ya que las observaciones vertidas son aplicables por analogía a las banderas provinciales, internacionales e institucionales 

No hay comentarios:

Publicar un comentario