Un objetivo a incorporar en la agenda de Rosario
El Contador Aníbal Bresín, presidente de Valor Rosario, entrega al Dr. Carrillo Bascary un testimonio por su participación
Tuve mucho gusto en
participar de las diversas actividades programadas por la Asociación Valor Rosario con motivo del 171 aniversario de haberse declarado a Rosario como ciudad.
Mi exposición evidenció la
adhesión del Centro de Estudios Belgranianos Rosario Siglo XXI y llevó por
título “Rosario, la Bandera y el
Monumento inconcluso” y se concretó en el auditorio de la Bolsa de Comercio
de Rosario (Paraguay 777) el pasado 3 de agosto en horas de la tarde.
El escritor Miguel Culaciati presentó la actividad
en nombre de la entidad organizadora.
Seguidamente desarrollé mi presentación que historió los orígenes de la ciudad a partir de la
humilde capilla dedicada a Nuestra Señora del Rosario, cuya fiesta universal se
celebra cada 7 de octubre, “día de la ciudad” por decisión de la Legislatura de
la Provincia (Ley Nº2882). Luego reseñé la importancia de la creación de la
Bandera nacional argentina como acontecimiento movilizador de los intentos para
construir un monumento a la Enseña patria que comprometió a varias generaciones
de vecinos. Después referencié que cuando se inauguró el mismo, en 1957, no se
encontraba terminado. Restaban colocar en el propileo las estatuas de “Las
Américas”, lo que se concretó en 1997, y la “Sala de las Provincias”, un espacio que el arquitecto Ángel Guido
concibió para representarlas por medio de sus símbolos locales, así como los avatares que siguieron hasta el
presente y de cómo su falta de concreción debería ser parte de la agenda de la
ciudad.
Asimismo, intenté poner en
valor la eventual recreación histórica
del primer izamiento de la Bandera (1812) un evento de enorme potencial
turístico e identitario cuya primera realización se concretó hace algunos años,
sin lograr continuidad pese a su extraordinario éxito. Finalmente destaqué el
gran objetivo comunitario que debería ser el lograr la plena autonomía municipal, un derecho reconocido por la
Constitución de 1994 y que permanece sin realización a consecuencia de los
intereses políticos y de la gran indiferencia que atañe a la mayoría de la
población.
Para finalizar se sorteó entre los presentes una estampilla sin valor postal de las que acreditaban
la contribución de los escolares a la colecta pro-Monumento (1936/1940), un
folleto explicativo del memorial editado en 1957 y dos ejemplares del libro “La
Catedral y Rosario, historia de vidas compartidas” que relaciona los valores
propios del templo y sus vínculos con la ciudad. Por su parte la Bolsa de
Comercio de Rosario distribuyó a los presentes el libro de investigación
histórica “Belgrano” (2012. Rosario)
que reúne notas de jerarquizados autores bajo coordinación de Roberto Elizalde.
En definitiva, fue una jornada de alto significado que
contribuyó al conocimiento de los orígenes de la ciudad y del protagonismo de
Rosario.
M.C.B.
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