El Monumento a la Bandera como mausoleo del general Belgrano
Por Miguel Carrillo Bascary
Un poco de Historia
Cuando se pensó en construir el Monumento Nacional a la Bandera, los autores del anteproyecto ganador, arquitectos Ángel Guido y Alejandro Bustillo; junto a los escultores José Fioravanti y Alfredo Bigatti incorporaron la "Cripta", un espacio que debía albergar los restos mortales del general Manuel Belgrano; que se encontraría en la base de la Torre, según explicaron en la memoria descriptiva (1). El lugar sería también una capilla que especulaban, debía ser atendida por frailes de la Orden de Santo Domingo.
Un detalle que no trascendió es que la propuesta implicaba un desconocimiento supino sobre las disposiciones de la Iglesia Católica, que no permite que la Santa Misa se celebre sobre los restos de una persona que no haya sido previamente canonizada.
Pese a su evidente atractivo conceptual la
iniciativa no prosperó, la causa determinante del rechazo fue la propia última
voluntad del prócer que estipuló ser enterrado en Bs. Aires, su ciudad natal.
Así dice la cláusula inicial del documento, donde destaco en negro lo
pertinente:
“Primeramente encomiendo mi alma a Dios Nuestro Señor, que la crió (sic) de la nada, y el cuerpo mando a la tierra de que fue formado, y cuando su Divina Majestad se digne llevar mi alma de la presente vida a la eterna, ordeno que dicho mi cuerpo, amortajado con el hábito del patriarca Santo Domingo, sea sepultado en el panteón que mi casa tiene en dicho convento, dejando la forma del entierro, sufragios y demás funerales a disposición de mi albacea”.
El "Archivo General de la Nación" ha publicado fotos del documento auténtico y de su transcripción oficial que puede verse en: https://www.facebook.com/ArchivoGeneraldelaNacionArgentina/photos/pcb.4211142075577643/4211137565578094
En consecuencia, el
frustrado mausoleo cambió su significado y hoy solo expresa el lugar “preciso”
del primer izamiento de la Bandera Nacional y un homenaje a su creador a quien
la estatua broncínea (obra de Fioravanti) lo muestra reflexivo, quizás pensando en
el difícil futuro de su amada patria.
La reciente iniciativa
Con estos antecedentes y
con diversas motivaciones que no tiene caso analizar, se han planteado
reiteradas iniciativas que promueven el traslado de los restos del prócer hasta
el lugar donde alguna vez lo pensó Guido.
Pareciera que cuando una
de estas propuestas se olvida por el inexorable paso del tiempo, surgen otras
voluntades que la replantean como reivindicación silente de la primitiva idea
de Guido; pero que omite considerar la voluntad del prócer. ¡ Nada menos!
Hace pocas semanas se conoció un proyecto de
resolución presentado ante la Cámara de Diputados de la provincia de Santa Fe
que postula:
“ARTÍCULO 1 -
Crear en el ámbito de la Cámara de Diputados y Diputadas de la Provincia de
Santa Fe la Comisión “Gestión para el descanso de los restos del Gral. Manuel
Belgrano en el Monumento Nacional a la Bandera”.
ARTÍCULO 2 - La finalidad de dicha
Comisión será la de realizar las gestiones pertinentes ante las autoridades
civiles y eclesiásticas nacionales y provinciales competentes, y en general,
ante quien corresponda, para efectuar el traslado de los restos mortuorios del
Gral. Manuel Belgrano desde el Convento Santo Domingo ubicado en calle Defensa
N.º 422, Ciudad Autónoma de Buenos Aires, hasta el Monumento Nacional a la
Bandera, ubicado en calle Santa Fe N.º 581, ciudad de Rosario, Provincia de
Santa Fe; para ser depositados en la “Cripta de Belgrano” a los fines de su
permanente descanso.
ARTÍCULO 3 - La Comisión estará
integrada por:
a) el/la Presidente de la Cámara de
Diputados y Diputadas o quien designase en su representación;
b) el/la Presidente de Bloque de cada
bloque, o quien fuera designado/a por el Bloque en representación del mismo;
c) invítese a participar a: el/la
Gobernador/a de la Provincia, el/la Intendente de la ciudad de Rosario, el/la
Presidente del Concejo Municipal de la Ciudad de Rosario, las y los
legisladores nacionales por la Provincia de Santa Fe, las y los Rectores de las
Universidades con sede en la ciudad de Rosario, un/a representante del
Instituto Belgraniano, directivos y periodistas de los medios de comunicación,
prestigiosos profesionales y académicos vinculados a la materia y a los
Colegios Profesionales de la ciudad de Rosario;
d) la enumeración antecedente tiene un
valor enunciativo, pudiendo la Comisión cursar invitación temporal o permanente
a quienes estime deban integrar la misma.
ARTÍCULO 4 - La Comisión, recabará la
información necesaria y promoverá las investigaciones históricas pertinentes,
pudiendo realizar convenios con personas o entidades públicas o privadas a los
efectos del cumplimiento de su objetivo.
ARTÍCULO 5 - La Comisión considerará que la eventual ubicación de los restos del prócer en la “Cripta de Belgrano” del Monumento Nacional a la Bandera permanezcan bajo la guarda de la Orden de Santo Domingo”.
Entre los fundamentos del proyecto se menciona:
“… ese nicho
permanece vacío, a la espera del traslado de los restos del General, cuya
concreción está limitada por su testamento. En efecto, hoy los restos descansan
en el Convento de Santo Domingo, ubicado en la calle Defensa N.º 422 de la
Ciudad Autónoma de Buenos Aires”.
Tras reconocer que el testamento del prócer disponía
sobre sus despojos morales, la propuesta abunda en palabras de su autor,
algunos de cuyos conceptos me permito destacar en negrita:
“En ese marco,
estamos convencidos de que además de constituir un anhelo del pueblo santafesino en general y rosarino en particular,
trasladar los restos del General al lugar donde él mismo protagonizó el hito
del 27 de febrero de 1812, puede convertirse en una ocasión para todos los
argentinos y argentinas de reflexionar y movilizarse en torno a los temas antes
descriptos: la necesidad de una Argentina verdaderamente federal y la unidad
del pueblo argentino.
En esa línea, siguiendo a algunos autores, respetuosamente elevamos para su consideración algunas opiniones para ser sopesadas frente a la disposición testamentaria:
“1º) En el año
1.820, los cementerios no existían y
las personas relevantes eran sepultados en los templos. Luego, en 1822 durante
el gobierno de Rivadavia, los cementerios fueron secularizados. Podría resultar lógico que Belgrano,
que se encontraba en Buenos Aires gravemente enfermo dispusiera que sea sepultado en el panteón que su familia tenía en el
Convento de Santo Domingo.
2º) Belgrano por el año 1819 se
encontraba en Cruz Alta soportando los rigores del invierno y la miseria. En la
capilla del Pilar fue visitado por el Dr. don Francisco Rivero, quién reconoció
los síntomas de una hidropesía avanzada. Ante este hecho, Belgrano sostuvo: “Sé
que estoy en peligro de muerte, pero la conservación del ejército pende de mi presencia.
Aquí hay una capilla donde se entierran los soldados: también puede enterrarse
en ella al general”. Las palabras de Belgrano permiten que nos hagamos la idea,
que el lugar donde fueren depositados
sus restos podía haber sido otro si así lo imponía el cumplimiento de su
servicio.
5º) La Nación decidió realizar un
monumento a la Bandera, debiendo ser “la obra más importante y artística de las
que en la actualidad existen en el país”. El monumento resume el alma de la
Patria y en él está reservado un lugar para el creador del estandarte patrio.
La vida de Belgrano está ligada a la vida de la Patria y a su máxima creación,
la Bandera Nacional.
Finalmente, el autor reseña que su proyecto cuenta con
antecedentes municipales y provinciales:
“En efecto, en el año 1998 el edil de la ciudad de Rosario, Raúl Lamberto, presentó un proyecto de Decreto que fue aprobado bajo en número Decreto N.º 14.804, el cual propone una comisión similar a la del presente, pero en el ámbito del Concejo Municipal de Rosario. Los conceptos vertidos en sus fundamentos han sido inspiración y fuente de los que nosotros aquí presentamos, e incluso las citas aquí ofrecidas pueden referenciarse con sus fuentes en dicho proyecto. Posteriormente, en el año 2005, también Raúl Lamberto ya como Diputado Provincial presentó en este recinto un proyecto de ley devenido en proyecto de comunicación, el cual obtuvo la media sanción, y que solicitaba estudios hermenéuticos a los fines de interpretar la voluntad testamentaria del Gral. Belgrano y su eventual posible compatibilidad con lo que aquí proponemos”.
Al respecto, me permito destacar que, en un gesto que le precia, el autor del proyecto menciona como antecedentes dos iniciativas protagonizadas por el Dr. Raúl Lamberto, perteneciente a una fuerza política distinta a la que él pertenece.
Opinión del “Instituto Nacional Belgraniano”
Se trata de una entidad que cuenta con reconocimiento oficial sin perjuicio de su autonomía académica especializada en la vida y obra del general Belgrano.
Su creación se remonta al año 1944. El decreto que lo oficializó le asigna diversas funciones, entre la que destaca a nuestro efecto la
contenida en el artículo 3º del pertinente decreto presidencial:
“La
colaboración con las autoridades nacionales, provinciales y municipales y con
las instituciones oficiales y privadas a fin de fijar objetivos de la enseñanza
de la vida del Prócer como, asimismo, el asesoramiento respecto de la fidelidad
histórica en todo lo que se relaciona con la persona del Doctor Manuel
Belgrano”.
En la actualidad es presidido por el Lic. Manuel Belgrano, descendiente
directo del prócer.
Ref. Proyecto sobre los restos del Gral. Manuel
Belgrano
SEÑOR PRESIDENTE:
De mi mayor consideración
Como presidente del INSTITUTO NACIONAL
BELGRANIANO, entidad oficializada a tenor del Decreto Nº1435/ 92; entre cuyas
competencias se cuenta “La colaboración con las autoridades nacionales,
provinciales y municipales y con las instituciones oficiales y privadas a fin
de fijar objetivos de la enseñanza de la vida del Prócer como, asimismo, el
asesoramiento respecto de la fidelidad histórica en todo lo que se relaciona
con la persona del Doctor Manuel BELGRANO” (art. 3º “c”·); me dirijo a Ud. en
conocimiento de que se habría presentado a consideración del honorable Cuerpo
de Su Presidencia un proyecto de resolución para crear la Comisión “Gestión
para el descanso de los restos del Gral. Manuel Belgrano en el Monumento
Nacional a la Bandera”.
Esto recrea otras iniciativas similares que
oportunamente fueron soslayadas por cuanto, la última voluntad del prócer
dictada el 25 de mayo del año de su fallecimiento, expresa enfáticamente:
“Primeramente encomiendo mi alma a Dios Nuestro Señor, que la crió de la nada,
y el cuerpo mando a la tierra de que fue formado, y cuando su Divina majestad
se digne llevar mi alma de la presente vida a la eterna, ordeno que dicho mi cuerpo, amortajado con el hábito de patriarca de
Santo Domingo, sea sepultado en el panteón que mi casa tiene en dicho convento,
dejando la forma del entierro, sufragios y demás funerales a disposición de mi
albacea”.
En el año 1903 los escasísimos restos mortales del
prócer fueron removidos de su primera ubicación en el ingreso al templo de
Ntra. Sra. del Rosario, en Bs. Aires, y se los colocó en el monumento que hoy
existe en su atrio; donde hoy se encuentran.
En consecuencia, cabe entender que debe respetarse la
decisión del fallecido; privilegiando su voluntad por sobre toda otra consideración,
como un gesto de homenaje a la entrega total que realizó por la Patria (2). Sin
otro particular saludo a Ud. con la más atenta consideración. -
Ciudad de Bs. Aires, 15 de marzo de 2021.
Firma:
Lic. Manuel Belgrano / Instituto Nacional Belgraniano/ Presidente
- De esta manera cumplo en referenciar lo informado sobre un tema de interés para todos los argentinos.
- Como miembro de número del "Instituto Nacional Belgraniano" suscribo totalmente la posición de la entidad.
- Finalmente, me hago eco de un sentir general, que podría expresar con las siguientes palabras: ¿será posible que no podamos dejar que los muertos descansen en paz?
Cuando falleció no existía tremendo monumento obra de arte que honra a nuestro prócer y a su creacion la Bandera que los argentinos visitamos es un lugar para que sus restos descansen en Paz. Debo aclarar que admiro profundamente al general Belgrano su conducta y su accionar.
ResponderEliminarEs cierto, pero resulta mucho más justo respetar su voluntad que pretender rendirle homenaje en mérmol cuando lo que deberíamos hacer como argentinos es cumplir con su mandato se sencillez y compromiso con la historia que a cada uno nos toca protagonizar.
Eliminarcomo chozna del gral. Belgrano, me adhiero al lic. Manuel Belgrano, los restos de mi antepasado, no deben tocarse, y cumplir su deseo de estar donde esta. lic. matilde W. Rosas y Belgrano
ResponderEliminarDejen a los patriotas fallecidos en paz cumpliendo con SU deseo.
ResponderEliminarDebe respetarse la voluntad del Gral Manuel Belgrano, y promover la difusion de su pensamiento y obra .
ResponderEliminarSin lugar a dudas comparto plenamente los deseos del benemérito Dr.Manuel Belgrano. Eterno descanso a su alma.
ResponderEliminarLic. Rolando Benitez De Ninnis
Ordeno que dicho mi cuerpo, amortajado con el hábito de patriarca de Santo Domingo, sea sepultado en el panteón que mi casa tiene en dicho convento. Dicho esto por nuestro prócer; común a todos los argentinos,debe tomarse como un punto de inflexión.
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